El 7 de abril, Día Mundial de la Salud, es una fecha clave para reflexionar sobre la importancia de la salud global y la necesidad de promover el bienestar en todas sus dimensiones. Este día nos recuerda que la salud no solo se trata de la ausencia de enfermedades, sino de tener acceso a servicios médicos adecuados, a una vida saludable, y de eliminar las desigualdades en el acceso a la atención sanitaria.
Cada año, la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece un tema específico para concienciar sobre problemas de salud urgentes. Este día es una oportunidad para sensibilizar a las personas sobre la importancia de adoptar hábitos saludables, como una dieta equilibrada, ejercicio regular, y una buena salud mental, así como para destacar los desafíos que enfrentan los sistemas de salud a nivel mundial.
Es un recordatorio de que la salud es un derecho fundamental y que debemos trabajar colectivamente para garantizar que todas las personas, sin importar su lugar de residencia o condición económica, puedan disfrutar de una vida sana y digna.